Debate sobre el crecimiento
(1975)–Willem Oltmans– Auteursrechtelijk beschermd69. Joseph E. SlaterJoseph E. Slater es presidente del Instituto Aspen de Estudios Humanistas. | |
[pagina 528]
| |
Tengo entendido que el Instituto Aspen, como continuación del trabajo del Club de Roma, está iniciando un estudio del planeta en su totalidad.
No tanto, pero ciertamente es una actividad relacionada. El Instituto Aspen se mantuvo en relación con algunas personas del Club de Roma mientras trabajaban en su informe. Por ejemplo, discutimos con Jay Forrester,Ga naar voetnoot1 Aurelio PecceiGa naar voetnoot2 y otras personas el carácter de los sistemas de planeación y análisis de recursos. A nosotros nos interesan muchos de los mismos elementos y objetivos que interesan al Club. Personalmente, creo que lo que el Club de Roma estaba haciendo era realmente una introducción al carácter del crecimiento, y no un estudio de ciertos límites del crecimiento. Es necesario estudiar el crecimiento dividido en dos aspectos, cuantitativo y cualitativo, mezclados de diferentes modos en diferentes lugares y en diferentes estadios del desarrollo. Tuvimos algunas diferencias, pero creo que el Club de Roma impulsó con enorme ímpetu un debate que se hacía imperativo en el mundo de hoy. Ha iniciado la presentación de una perspectiva global, que era lo que hacía falta. Concretamente, lo que el Instituto Aspen ha hecho después del informe del Club de Roma es lo siguiente: Hemos establecido un grupo de trabajo primariamente dedicado al estudio de opciones alternativas en los Estados Unidos. Nos proponemos atraer a unos veinticinco o treinta profesionales para trabajar durante varios años en varios campos clave en diferentes sectores de la sociedad. Después de un cuidadoso y profundo análisis de las opciones, estos peritos presentarán al gobierno y al pueblo las que sean asequibles a esta sociedad. Los expertos definirían las implicaciones primarias, secundarias y terciarias de estas implicaciones. Nos interesan alternativas y opciones, más que metas finitas. Tratamos de llevar a cabo este trabajo y presentarlo de modo que las ramas ejecutiva y legislativa del gobierno y los elementos dirigentes de la sociedad se vean forzados a sostener debates mejor meditados y pensados sobre las opciones que de otro modo fueran asequibles a la sociedad. Y lo que es más importante, estudiaremos las implicaciones de las opciones verdaderas, pues pensamos que limitarse a señalar metas es algo demasiado estático y, hasta cierto punto, un vacuo ejercicio. Forzar un más pro- | |
[pagina 529]
| |
fundo debate y análisis de las opciones es un proceso dinámico esencial para todo estado, particularmente para un estado democrático. Estamos tratando de agrupar personas de distintas comunidades que sean peritas en el análisis de sistemas y piensen disciplinadamente. A estas personas las forzaremos a trabajar con líderes, políticos, especialistas en comunicación, sociólogos, abogados, jueces, etcétera, que ahora juzgan por intuición y, a menudo, en forma irracional. Éste es el campo donde se toma la mayor parte de las decisiones y en que los asuntos principales no son cuantificables ni lo serán jamás. Lo que pretendemos hacer es tender un puente más corto entre aquellos que se han disciplinado en el trabajo científico y el análisis de sistemas, por una parte, y la comunidad de los que toman las decisiones, los cuales deben saber cómo usar tales materiales sin abusar de ellos. El principal problema consiste en cómo hallar el modo de mejorar tales materiales y en sustituir la relación antagónica entre las personas que han de tomar las decisiones políticas o de otra índole, basadas en ideas no cuantificables, y aquellas otras que laboran con datos cuantificables. Necesitamos construir una comunidad nacional y mundial de personas capaces de pensar tomando en cuenta las implicaciones de las decisiones principales, que son las que exigen pensamiento más disciplinado. A mi parecer, el Club de Roma nos ha proporcionado un útil comienzo en este terreno. En el curso de los años y decenios próximos, se llegará a una mayor perfección del análisis de sistemas y del pensamiento científico disciplinado. Los científicos habrán de capacitarse para trabajar más armoniosamente con los líderes interesados en los problemas sociales y humanos. Éste es el primer objetivo. El segundo objetivo es llevar los resultados de los mejores análisis que podamos hacer no a ninguna institución singular, sino a un conjunto de instituciones que unan sus esfuerzos coordinadamente, con la participación de individuos preminentes y movimientos de consumidores o de otra índole (y no limitarnos a las instituciones organizadas, como las universidades). Otros sistemas alternativos tratarán con sectores mayores, como la energía, la agricultura, la población, la educación, la comunicación y la economía y la sociedad. Otros sistemas elaborarán estos análisis para presentarlos en forma fácilmente comprensible y someterlos a un debate público esclarecedor y forzar a las ramas ejecutiva y legislativa del gobierno a discutir y examinar todos aquellos as- | |
[pagina 530]
| |
pectos y opciones que hubieren de hacerse comprensibles. Esto es ciertamente esencial en un país democrático. Creo que esto es esencial en toda sociedad que desee decidir sus opciones en forma meditada y que desee conocer las implicaciones y las opciones alternativas. Creemos que es imposible llevar a cabo tal trabajo en el plano de una nación o estado sin relacionar los datos y conocimientos con el marco de lo mundial. No es posible acometer el problema de la energía o los demás a que me refería sino en el plano mundial. Y esto es lo que nos hace volver al Club de Roma y a esos trabajos que TinbergenGa naar voetnoot3 y muchos otros están efectuando. En el Aspen, esperamos definitivamente tender puentes hacia todos esos grupos que trabajan en el mundo entero y mantenerlos expeditos a la comunicación. Como decía antes, pretendemos lograr la participación no sólo de las instituciones tradicionales, como universidades y centros de investigación, burocracia gubernamental y demás, sino (y no sólo para consulta, sino para que contribuyan realmente al trabajo) de las mujeres, los jóvenes y los individuos, incluyendo personas como Ralph NaderGa naar voetnoot4 y otros que han venido a convertirse por sí mismos en instituciones. Muchos ofrecen alternativas diferentes de las que proponen las instituciones establecidas. Esto es, si uno tomara únicamente aquellas alternativas que se les ocurriesen a las instituciones tradicionales establecidas, conseguiría un solo conjunto de alternativas. Por otro lado, si uno explora ampliamente esta sociedad podrá ofrecer alternativas muy diferentes. Por ejemplo, algunas personas podrían abolir ciertas formas de escolaridad o combinar las comunicaciones y la educación en un proceso de aprendizaje. Nosotros no queremos quedar capturados por las alternativas en que ahora piensan las instituciones tradicionales o establecidas; hemos de penetrar en estos nuevos movimientos para explorar las alternativas que nos ofrecen. Asimismo, hemos de evitar esa trampa que suelen tender los estadistas o los funcionarios nombrados por elección, de ofrecernos dos o tres falsas alternativas y una auténtica, | |
[pagina 531]
| |
para asegurarse que sea aceptada la única auténtica que nos presenta. Hemos de asegurarnos que tales debates se efectúan con la más absoluta integridad, y lo mismo los análisis de los datos. Nuestra intención es crear una institución independiente, ajena al gobierno y libre, pero que trabaje con él y reúna para él datos, ideas, pensamientos, etcétera. (Es decir, una institución que se financie fuera del gobierno, de modo que no esté ligada a ningún sistema o partido y que intente orquestar los mejores pensamientos de los diferentes sectores de la sociedad, sean o no cuantificables.) Los valores, prioridades y actitudes e, incluso, las irracionalidades, representan un enorme papel en los negocios humanos. Hay que tomarlos en cuenta.
¿Cree usted que el material que el Instituto Aspen recoja podría ser una variable con la cual mejorar el modelo de Forrester?
Nos gusta la idea de un consorcio que reúna unas veinte o treinta universidades, en el que participe el mit y, esperemos, muchas otras instituciones. Ciertamente deseamos permanecer en contacto con las personas que elaboraron el informe del Club de Roma, e igualmente con las personas que lo han criticado. Sigo creyendo que el debate iniciado por el Club de Roma ha pagado con creces, se esté o no de acuerdo con uno u otro aspecto de sus resultados.
Dicho de otra manera, el Club de Roma, Aurelio Peccei, está en contacto con usted para lo que concierne a esta nueva institución.
Sí, muchos de sus miembros participan y, desde luego, Aurelio Peccei, Meadows y otras personas que tienen nuestra publicación. Hemos difundido éste tanto como hemos podido, pues para decidir si fundar tal instituto, hemos creído necesario conseguir las mejores ideas del máximo número de personas. El Instituto Aspen no está vinculado a ningún sector particular de la sociedad. Ha internacionalizado su directiva, su personal, su mentalidad y sus programas. Hemos elegido seis áreas de interés relacionadas entre sí: ciencia, tecnología y humanismo; la justicia y el individuo; el medio y la calidad de la vida; y asuntos internacionales. En estas seis áreas estamos ordenando talleres conducentes a la acción. El Instituto Aspen reúne personas de los diferen- | |
[pagina 532]
| |
tes sectores de la sociedad que tratarán de pensar disciplinadamente sobre las implicaciones de las alternativas y sugerir acciones y resultados concretos.
Las Naciones Unidas están amontonando millones de palabras en informes y documentos. ¿Cómo piensa usted que pudiera evitarse que la labor del Instituto Aspen, del Club de Roma o del MIT consistiera únicamente en agregar más papel a esa torre de Babel?
Ya he señalado en mis comentarios anteriores que unos cuantos de nosotros hemos trabajado varios años en la creación de un instituto que ahora ya existe. Es la Federación Internacional de Institutos de Estudios Avanzados, la fiiea (en inglés, ifias). Hemos tomado unos veinticuatro institutos de la más alta calidad de todo el mundo, como el Instituto Pasteur, el Instituto Nils Bohr de Física, el Instituto Oceanográfico de Woods Hole, la Corporación Universitaria de Investigación Atmosférica, el Instituto Aspen, el Centro de Investigación Económica de Japón, y los hemos unido en una federación que ejerce tres principales funciones: la primera es efectuar investigación coordinada sobre problemas transnacionales y transdisciplinarios; la segunda consiste en intercambiar profesores y estudiantes posdoctorados; la tercera es planear cada año con cinco años de anticipación, de modo que los planes de las instituciones comiencen a conformarse entre sí y, con el tiempo, llegar a integrar una universidad de facto (sin campus, por supuesto). Creo que una vez puesto en marcha este plan, la fiiea podrá rendir calidad y, operacionalmente, relacionarse con los problemas de las Naciones Unidas. Puede trabajar con líderes enérgicos, como Maurice Strong,Ga naar voetnoot5 que está tendiendo puentes entre instituciones de alta calidad (particularmente las ya existentes) que están dispuestas a explorar en el trabajo transnacional transdisciplinario. Nosotros podemos evitar la proliferación de organismos en la onu, lo mismo que muchas rigideces burocráticas. La fiiea ha tenido su primera asamblea en Trieste, en octubre de 1972, y sus miembros convinieron el programa que acabo de esbozar.
Sin duda, la capacidad del Sr. Maurice Strong se debe a su vasta experiencia administrativa en negocios particulares. Tal vez por ello quizá nos estemos acercando a un mundo más manejable. | |
[pagina 533]
| |
Primero, Strong es un administrador eficiente. Es también un hombre abierto a las ideas y nuevos procedimientos para hacer las cosas. Procura atraerse personas capaces de dondequiera que se encuentren. No le preocupa el que una persona proceda de los negocios, las organizaciones obreras, la secta académica, la onu o cualquiera otro lugar. Su interés es orquestar a personas de diversa procedencia para formar equipo. Creo que su genio radica en su energía, devoción y disposición a mantener abiertos sus poros a las ideas y las personas. De esta manera, obtiene el apoyo de personas que le son leales, cuya amistad se gana y a las cuales compromete en la tarea de trabajar en pro de un mejor orden mundial. |
|